GRAMÁTICA DE LA EVASIÓN
La recurrencia de algunos compañeros de trabajo por conocer detalles de mi vida privada me hace mucha gracia. Las más insistentes son ellas. Hay veces en que las preguntas son tangenciales y otras, como hoy, el interrogatorio se afila como una navaja. Es entonces cuando mi ingenio se agudiza, el discurso se estructura sobre una gramática del género indefinido y el resultado es una mayor confusión y desconcierto para sus cotillas inquietudes.
Me he dado cuenta que no registran muchas cosas que suelo dejar caer. Me rio y nada me gustaría más que cruzármelos alguna noche de marcha en el ambiente, ese día que decidieran ver que existen muchos otros mundos más allá de su protegido hábitat hetero.
Me he dado cuenta que no registran muchas cosas que suelo dejar caer. Me rio y nada me gustaría más que cruzármelos alguna noche de marcha en el ambiente, ese día que decidieran ver que existen muchos otros mundos más allá de su protegido hábitat hetero.
13 comentarios
nana -
harry -
coach, anonimado -
como dijo efege: "...el post anterior, era mío".
Anónimo -
Sí, tienen MUCHA gracia las conversaciones personales que de vez en cuando (y de cuando en vez) se/te/nos imponen en el trabajo. Lo mejor de ellas: cuando es tu interlocutor quien utiliza esa gramática-trans-gender.
"Te-he-pi-lla-o" -mascullas pa tus adentros, mientras luces descaradamente una sonrisa sibilina.
coach febril y masculbuciendo algo de american grammar -
efege -
coach, la gramática es dura y el catellano inflexible. Por eso surgen los americanismos ¿viste?
ludwig -
nimia -
coach -
efegé -
nimia -
nimia -
ludwig -